Las festividades iniciaron con la procesión folclórica, donde en una carreta tirada por bueyes traslada a la imagen de Maria hasta el santuario Virgen del Rosario, seguida por creyentes realizando cánticos y orando. En la plaza aledaña, se colocaron mesas largas para recibir a los peregrinantes en un gran almuerzo. Polcas y jinetes dieron un espectáculo muy apreciado por los recurrentes.
Durante la serenata, hubieron diferentes espectáculos artísticos, como danzas folclóricas, grupos musicales como Los Orrego y Generación. Tras la misa central, fuegos artificiales dieron cierre al evento, el Mons. Zacarías Martínez agradeció a las personas que hacen posible llevar esto a cabo, ya que gracias a la colaboración de la ciudadanía es posible.
Octubre / 2015