[pullquote align=»left|center|right» textalign=»left|center|right» width=»30%»]Los únicos perjudicados son los niños[/pullquote]
Los llantos y los sollozo no quedaron atrás en este Karay octubre, quizás fue por la impotencia al verse avasallados con medidas autoritarias por parte del Ministerio, o al sentirse cautivos a la situación de su familia e hijos, que pasaran hambre, en este caso las Inquietudes, aflicciones y congojas del ánimo, no se deja sosegar, o por el riesgo que amenaza, o por el mal que ya se padece.
El Ministerio de Educación y Cultura M.E.C. cumplió con lo que parecía una amenaza, descontar los 15 días caídos a los 18.299 educadores de la Federación de Educadores del Paraguay, (FEP).
Con esta medida de amedrentamiento, ha caído el telón para la FEP y su intento por lograr un acuerdo razonable entre ellos y el Ministerio, que a pesar de habérseles dado la razón en sus peticiones jubilatorios y mejoras salariales, el Gobierno les dijo no puede ser, llegando así a dejar sin solución una deuda histórica con el Magisterio.
El descuento se hizo de una sola vez, descontándoseles el 50% de sus sueldos, tomando en cuenta que una maestra primaria gana G. 1.300.000 (U$S 290) por mes, con el descuento pasó a recibir el 50% de su salario, le quedaron G. 650 mil (U$S 145, poca más de cuatro dólares por día, para comer), el descuento no fue en dos etapas como se había anunciado en principio.
Los llantos y los sollozo no quedaron atrás en este Karay octubre, quizás fue por la impotencia al verse avasallados con medidas autoritarias por parte del Ministerio, o al sentirse cautivos a la situación de su familia e hijos, en este caso las Inquietudes, aflicciones y congojas del ánimo, no se deja sosegar, o por el riesgo que amenaza, o por el mal que ya se padece.
La ministra de Educación, Marta Lafuente, dijo que espera que con esto se dé por culminado un capítulo desagradable y que también «represente el cierre de la historia de fragilidad del Estado en la conducción de la construcción de la educación como bien público».
Resulta inexplicable la decisión de la ministra Marta Lafuente de hacer cumplir las amenazas. Desconociendo los puntos de los maestros que en su mayoría no llegan a cobrar el salario mínimo vigente, el gobierno fue capaz de llevar a cabo sus propósitos a costa de miles de docentes esperanzados por mejorar su calidad de vida.
A veinticinco años de haber derrotado a la dictadura, aún nos pesa el no haber sabido culminar adecuadamente esa victoria y, en el marco de la nueva vida republicana, o Nuevo Rumbo que nos prometió el Partido Colorado en la última elección, lamentamos no haber preparado a las organizaciones sociales para continuar avanzando en los derechos nos comentó un conocido dirigente de la FEP.
Además reclama; «…el no haberse presupuestado, y de hecho, haber quitado la merienda y el almuerzo escolar, en las escuelas públicas, además de sacar a los maestros el salario familiar, se prepara al estamento docente para un nuevo rumbo», concluyo diciendo.
El ejercicio de la Política siempre nos limita la opinión fundada y priorizamos necesariamente en función a la acción, y no al curso de la discusión que nos lleve a conclusiones de un mínimo rigor.
Es evidente que el juego de la política real nos encuentra mal parados. Los neoliberales, a través de los medios de comunicación que controlan, gracias a los errores inexcusable que al respecto ha cometido la propia Democracia, favorecen el quiebre del descontento. No sería lo mismo que éste fuese capitalizado directamente por la gente menos autoritaria, a que se distinguiera entre esa gente y la proveniente de la dictadura.
Más allá de la conciencia que tengan los actores respecto a los intereses que pueden aunar, este dato ratifica que debimos dar pasos mucho antes para impedir estos quiebres.
Esta actitud se agrega al dictamen Judicial que declaraba la huelga legítima, y pese a ello, y sin un juicio justo se les descontó su salario al profesorado. Estas maniobras evidencian el maltrato al que se somete al profesorado.
Además, desnuda la crisis en que está sumida la educación en Paraguay con un deficiente financiamiento, el mantener escuelas subvencionadas para la clientela, con maestros pagados por el ministerio y las pésimas condiciones laborales de los maestros.
La actual política educacional tiende a mantener y profundizar el déficit en materia de equidad y calidad en perjuicio de los niños, niñas y jóvenes. La huelga fue provocada por la negativa del gobierno a conformar una real mesa de negociación y las escasas reuniones con otros sindicatos, incluso la Conferencia Episcopal Paraguaya se mostro dispuesta a mediar en el tema, Pero este fue un verdadero diálogo de sordos ante la negativa permanente a tratar los temas propuestos.
Esto provocó un movimiento gremial que se fue desgastando en el tiempo y en el que los errores de la conducción jugaron un papel determinante para la derrota.
Nuestra postura permanente fue apoyar la movilización, nos decía un docente a pesar de nuestras opiniones contrarias a la forma en que se llevaban a efecto. Respecto a las demandas, insistimos siempre en la necesidad de no mezclar dos temas distintos concluyo diciendo.
Estimamos correctamente que la única manera de salir al paso del dictamen del Congreso hubiera sido volver a cero por parte del Gobierno, no presentando demandas judiciales. Pero tozudamente se insistió, con la esperanza de mantenerlo como tema a discutir con el futuro Gobierno.
Los mensajes incompletos y tendenciosos entregados durante el paro por la prensa que sabe muy bien lo que quiere y que la ciudadanía ignora, tergiversaron lo planteado por los sindicalistas.
Esta situación generó muchas veces expectativas irreales y en otros casos una confusión que lamentablemente se mantiene hasta hoy. Los avances sobre el bienestar no responden a la actual conducción del gremio, sino a gestiones anteriores.
Por otro lado, unos 200 docentes momentáneamente estarían siendo desvinculados del Ministerio de Educación y Cultura (MEC) conforme a la Resolución N° 204, según confirmó Humberto Ayala, director de Relaciones Gremiales de la cartera educativa.
En el documento se resuelve dejar sin efecto los nombramientos realizados hasta el mes de julio de 2013 en rubros docentes con carácter interino, «al personal que no cuenta con el perfil requerido».
Carlos Parodi, presidente de la Federación de Educadores del Paraguay (FEP), manifestó que los maestro/as denuncian ante el gremio su supuesta desvinculación sin recibir notificación alguna, al parecer se quiere dar paso a una «dictadura laboral».
EL OTRO ANALISIS…
«Los estudiantes de los mejores colegios públicos y privados de Paraguay tienen un rendimiento similar al de los alumnos de los peores colegios de Singapur» ¿Usted escucho esto, de conferencistas extranjeros?
Pues bien, durante la coerción de las libertades los 70 y los 80, del Chile (*) en dictadura, se municipalizo la enseñanza cuyo objetivo fue para lograr el equilibrio fiscal minaron la vocación docente en medio de la reducción del presupuesto educacional y de la caída del salario real de los profesores.
Después de una campaña denigratoria, (año 1974) los profesores no alcanzaron un salario real, solo fue similar al de 1970, y mientras tanto se cuadruplica el Producto Interno Bruto per cápita (PIB). Con este panorama y sin parlamento y un fusil al hombro, les fue más fácil municipalizar la educación, esto solo se limitó a administrar la crisis institucional, mientras la crisis educacional empeoró aún más, situación que se arrastra hasta nuestros días. No quisiéramos tocar situaciones más penosas ocurridas en el país trasandino.
Esto podría ser una premonición únicamente, pero, si esto se cumple ¿Que pasará?; que los municipios con mejores presupuestos podrán dar una mejor educación, y podrán ser capaces de entregar estudiantes con derecho a optar a las mejores universidades.
Después gritaran los neoliberales a los cuatro vientos, ¡¡Miren los genios que llegan a las universidades!! Olvidándose de la discriminación, de los miles que se quedaron limpiando pisos, por vivir en un municipio pobre.
Siempre las negociaciones gremiales tuvieron un fruto, escasos o mezquinos, como ha sido habitual en estos gobiernos. Pero esta es la primera negociación con una huelga tan larga en que los profesores no ganan absolutamente nada.
A esto se sumó a las amenazas de descuentos, la extensión del período escolar hasta bien entrado diciembre, así como el escaso apoyo de parlamentarios y la sociedad influida por los medios comerciales. Si queremos de verdad pasar a otro estado de desarrollo, necesariamente tenemos que perderle el miedo a debatir en torno al país que soñamos.
Para ese país debemos construir un sistema educacional que no tiene porqué apoyarse en el lucro ni en un Estado ineficiente. Se requiere un gran esfuerzo colectivo, común inspirado en el deseo de ser mejores, organizado por un Estado con capacidad financiera y operativa para llevar adelante una educación de calidad, con el apoyo de privados que quieran contribuir imbuidos por su responsabilidad social antes que por el lucro.
Octubre 2013.(*) Recurrimos como ejemplo al proceso chileno, por ser el primer país que experimento, el neoliberalismo en la región, donde se implantó un capitalismo monetarista, (Economía Social de Mercado) teoría del economista estadounidense Milton Friedman (19122006), al vedársele lo Social quedo reducida a Economía de Mercado. Friedman, premio Nobel de Economía 1976. Principal figura de la denominada Escuela de Chicago y del monetarismo que ésta propugna.
Lectura Adicional
EPILOGO
Carta al presidente Horacio Cartes:
La Asamblea Permanente de los Derechos Humanos remitió una carta pública al presidente Horacio Cartes, haciéndole ver, las posibles violaciones a los Derechos Ciudadanos de los docentes, la desigualdad, discriminación y pérdida de calidad de vida, e infringir 9 artículos de la Constitución Nacional, lo que revela, un sometimiento por parte del Estado a docentes y funcionarios.
En la nota suscrita por Nils Candía Gini, se hace una comparación en cuanto a la seguridad social de docentes y funcionarios, en relación a los aportes al Instituto de Previsión Social (IPS) y compara con asegurados del sector privado.
En la nota se menciona que el sistema del IPS es un aporte del 25 por ciento del salario; de eso a la patronal le corresponde aportar 16 por ciento y al obrero el 9 por ciento. En retribución el jubilado recibe el 100 por ciento del salario, jubilación y servicio médico integral para el titular, esposa e hijos menores, además de recibir salario familiar por los hijos menores de 18 años.
En tanto que el sistema vigente para docentes y demás funcionarios, en el que estos aportan a la Caja de Jubilaciones y Pensiones el 16 por ciento del salario, y los docentes, para tener atención médica y hospitalaria del IPS, aportan el 5 por ciento de su salario. «Esto nos muestra que los docentes aportan el 21 por ciento del salario mensual y reciben mucho menos que los obreros de la empresa privada con su aporte del 9 por ciento».
En otra parte el comunicado dice, «… que los obreros del sector privado con 25 años de aporte y 60 años de edad se jubilan con el 100 por ciento del promedio de salario de los tres últimos años, mientras que los docentes, con el aporte del 13 por ciento más que el obrero privado equivalen a 58 años de aportes, con el agravante de que al jubilarse cesa todo el servicio de salud del IPS».
«Mientras que a docentes se le sustrae 21 por ciento y funcionarios públicos se sustrae el 16 por ciento de sus salarios mensuales, el Estado no aporta a la Caja de Jubilaciones».
«El artículo 6 de la Constitución Nacional expresa taxativamente: La calidad de vida será promovida por el Estado», manifiesta la nota enviada al presidente Horacio Cartes.
Mientras que el obrero del sector privado aporta G. 148.500 sobre el sueldo mínimo, en tanto los docentes pagan G. 346.500 mensual.
«Señor Presidente, -continúa la nota- debemos preguntarnos cómo se genera este verdadero escándalo jurídico, donde la desigualdad, la discriminación y pérdida de la calidad de vida son tan evidentes, en los obreros dependientes del Estado.
El Estado infringe los artículos 1,6,10,41,47,86,95,102 y 113 de la Constitución al no cumplir con su condición de patrón social, el más importante de la República, al no aportar el 16 por ciento para el seguro médico y la jubilación de sus empleados, sometiéndolos a un verdadero régimen de esclavitud», dice la nota suscrita por Nils Candía Gini.
Puntualiza que en virtud del derecho de igualdad ante la ley y del artículo 102 de la Constitución, los docentes « tienen derecho a exigir la devolución del 12 por ciento de sus aportes, ya que tal obligación surge del despojo consumado por el Estado ausente e irresponsable».
«Señor Presidente, la discriminación y la negación de los derechos ciudadanos a docentes y funcionarios del Estado constituyen una injusticia inaceptable por atentar contra los «derechos humanos esenciales, como son los derechos a la vida y la libertad», concluye el texto.